11 buenos hábitos para el cuidado de la piel seca e irritada
Áspera al tacto, con sensación de tirantez y frágil. La piel seca es aquella que carece de lípidos y/o agua. Causa incomodidad, se irrita con facilidad y carece de vitalidad. Se necesitan buenos hábitos diarios y un cuidado nutritivo y específico de la piel para restaurar su salud y belleza.
- 1. Evita tomar baños calientes largos, ya que estos eliminan la película hidrolipídica que protege la piel. Opta en su lugar por duchas rápidas con agua templada.
- 2. Usa un limpiador suave adecuado para piel seca (pastilla de limpieza dermatológica o gel de ducha rico en emolientes) para la higiene, y evita el jabón, ya que es demasiado abrasivo
- 3. Después de lavarte, sécate cuidadosamente dando toquecitos en la piel en vez de frotar de forma agresiva.
- 4. Hidrata la piel todos los días cada vez que te laves el rostro y cuerpo, usando una crema hipoalergénica, calmante y nutritiva o loción especialmente formulada para piel seca o piel irritada.
- 5. Elimina el maquillaje siempre antes de acostarte y, si es posible, usa un desmaquillante nutritivo (aceite o leche).
- 6. Bebe al menos 1,5 litros de agua al día para mantener la piel hidratada y mantener su elasticidad: la ingesta insuficiente de agua puede afectar rápidamente a la piel (el tono de la piel disminuye, las arrugas y líneas finas se hacen más visibles).
- 7. No sobrecalientes tu casa o lugar de trabajo en el invierno. Si es necesario, utiliza un humidificador de aire: el aire en ambientes con calefacción es extremadamente seco y agresivo para la piel que carece de hidratación.
- 8. Para tu ropa y ropa interior, opta siempre por algodón en lugar de tejidos sintéticos que irritan la piel.
- 9. Usa guantes de limpieza: los productos de limpieza son muy abrasivos y pueden resecar la piel de las manos.
- 10. Mantén una dieta equilibrada. En particular, varía tu consumo de aceite (de semillas, de oliva, colza, nuez, uva, etc.) para asegurarte de obtener la cantidad adecuada de ácidos grasos esenciales.
- 11. Si tu piel sigue seca a pesar de estas precauciones, consulta a un especialista.