La caída del cabello está relacionada con los cambios de estación. Algunas personas experimentan una mayor pérdida de cabello cuando los cambios de temperatura asociados con las estaciones se convierten en un factor de estrés para el cabello.

En cualquier caso, se trata de un fenómeno cíclico, natural y pasajero.

La pérdida de cabello asociada a los cambios de estación es algo muy común. En realidad, es un hecho fisiológico y natural, y vemos ejemplos en muchos seres vivos que tienen ciclos estacionales, como por ejemplo las plantas, al igual que la piel y el cabello. El pelo cumple muchas funciones, como la de proteger la piel y contribuir a regular la temperatura, hasta el punto de que puede ayudar a estabilizar la temperatura del cerebro[i]. El pelo también protege de los elementos meteorológicos, así como de la radiación ultravioleta. Al igual que los animales, los seres humanos mudamos el pelo de forma natural.

El ciclo de vida del cabello consta de tres fases principales en lo que se puede denominar el ciclo ACT.

A: la fase anágena (crecimiento)

C: la fase catágena (de transición o regresión)

T: la fase telógena (o de reposo)

Con el cambio de estación, algunas personas experimentan pérdida de cabello. En la mayoría de los casos, la pérdida de cabello ocurre principalmente en primavera y otoño, cuando el cambio de temperatura se convierte en un factor estresante para el cuero cabelludo y los folículos pilosos.

Cuando se produce el cambio de estación, esta transición provoca en algunas personas una caída del cabello. La mayoría de la gente experimenta una mayor pérdida de cabello en primavera y en otoño, cuando los cambios de temperatura asociados con las estaciones se convierten en un factor de estrés para el cabello.

La caída del cabello estacional se puede mitigar cuidando la salud capilar a lo largo de todo el año, adoptando algunos sencillos hábitos. Lo primero que hay que hacer es seguir una dieta sana para que el cabello reciba la cantidad adecuada de nutrientes, vitaminas y minerales, que desempeñan un papel fundamental en su ciclo vital. En algunos casos, puede ser útil la ingesta periódica de algún suplemento nutricional específico, especialmente durante los cambios de estación. Además, es muy importante utilizar productos para el cuidado del cabello con una formulación delicada, que no sean irritantes, sino que tengan un efecto calmante y que actúen específicamente contra los factores desencadenantes asociados a los cambios de estación.

Laboratoires Bailleul, líder en el tratamiento de la alopecia, ha desarrollado una gama completa de tratamientos dermatológicos, productos cosméticos y complementos nutricionales. Estos tratamientos específicos, enriquecidos con activos innovadores para la salud capilar, ayudan a afrontar mejor y a prevenir la caída estacional del cabello.

[i] Yesudan P., Human Hair – An Evolutionary Relic? Int J Trichology. 2011 Jul-Dec; 3(2): 69.